En primer lugar retiramos la tapicería antigua.
Para ello utilicé un destornillador pequeño, que me permite levantar las grapas y una mordaza para retirarlas.

Podemos ver que el tapizado de la silla se había deteriorado del tiempo por lo tanto procedí a retirarlo también.

Segundo paso reparar el asiento.
Para ello utilicé: Cinta de persiana, 5 metros y una grapadora manual.
Para darle resistencia a las tiras, me ayudé de la mordaza dejándolas muy tirantes y en un solo sentido, horizontal.

Ten en cuenta que se van entrelazando en sentido vertical, de esta forma le damos más resistencia al asiento.

Entrelazado con las cintas para un mayor refuerzo

Tercer paso lijar la madera.
Para ello utilizamos una lijadora eléctrica, con lija gruesa grano 60 u 80.
Como en este caso llevaba muchas manos de pintura, lo que tuve que hacer es ayudarme de un decapante, en este caso elegí uno de Titanlux, que a los 20 minutos ya te permite eliminar la pintura con una espátula, después del decapante usé la lijadora para perfeccionar toda la madera.

Cuarto paso teñir la madera.
Para ello betún de Judea muy disuelto en aguarrás y lo apliqué con un trapo de algodón.

Quinto paso reparar el asiento.
Necesitamos: esponja de mucha densidad que cortamos al patrón de la silla unos 3 cm de espesor
esponja de densidad 1cm para recubrir la anterior y guata que sujetará todo el asiento.

Sexto paso, pintar la silla.
Necesitamos Pintura Le Decorative marfil y una brocha.

Una vez pintado dejamos secar, damos dos manos de pintura y lijamos entre ellas,  y con una lija de agua seca desgastamos todas las zonas en las que queremos que se vea la madera y todas las aristas de la silla.

Septimo paso, dar cera de patina.
Necesitamos cera de color nogal (que aplicamos con un trapo de algodón o muñequilla) y lustramos para que la madera brille y se quede muy fina al tacto.

Octavo paso, tapizar con la tela elegida.